27 de febrero de 2015
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El pasado viernes, en el Instituto Italiano
de Cultura de la Ciudad de México (IIC),
tuvo lugar la inauguración de una muestra de
gran importancia para entender las raíces de
una de las gastronomías más famosas del
planeta italiana desde un punto de
vista histórico: “Pellegino
Artusi: la unidad italiana en la cocina”.
En colaboración con la Consulta de Emilia-Romaña
en el mundo y con su representación en
México, Laila Tentoni, vicepresidente del
Instituto Casa Artusi de Forlimpopoli,
ofreció una conferencia sobre este tema, que
fue precedida por las palabras de Gianni
Vinciguerra, director del IIC, quien se
dirigió a los presentes explicando: «Al
igual que México —que recibió recientemente
el reconocimiento de la UNESCO por su
gastronomía como patrimonio inmaterial de la
humanidad— Italia cuenta con una de las
cocinas más interesantes y apreciadas a
nivel mundial».
Algunos momentos
de la conferencia de Laila Tentoni,
acompañada por Gianni Vinciguerra, en el
Instituto Italiano de Cultura de la Ciudad
de México.
«Además —continuó Vinciguerra—, ambos países cuentan con
tradiciones alimentarias que se han
desarrollado en forma regional. En el país
de la bota esto se debe a la división
política y cultural que caracterizó a lo
largo de los siglos la historia de esa
península. Como resultado de esta situación,
muchas ciudades y pequeñas aldeas han
perfeccionado sus propias recetas con el
paso de los años. Una gran cantidad de
ellas, sin embargo, habría podido perderse
de no haber sido por la genialidad y la
perseverancia de un hombre —Pellegrino Artusi— quien, a finales del siglo XIX y en
los primeros años del '900, decidió recorrer
ese recién unificado país para recolectar
información acerca de ese gran patrimonio.
Artusi es considerado hoy uno de los padres
de la gastronomía italiana y uno los mayores
artífices de su tradición culinaria. Si bien
en su famoso libro “La ciencia en la cocina
y el arte del buen comer” privilegia algunos
platillos de su tierra natal, Emilia Romaña,
también están presentes especialidades de
todas las demás regiones italianas, desde
Sicilia hasta los Alpes».
El centro cultural Casa Artusi —instituido
en 2007 en Forlimpopoli, ciudad natal de
Pellegrino— se encarga de preservar la
memoria de este personaje así como el
patrimonio gastronómico que documentó. La
importancia de la figura de Pellegrino
Artusi para Italia y las actividades del
centro cultural fueron el tema de la
ponencia que Laila Tentoni, su
vicepresidente, ofreció a los presentes en
el auditorio del Instituto de Cultura.
«No puedo dejar de mencionar que si hoy
estamos aquí es gracias a la Consulta de
Emilia-Romaña en el mundo —dijo Tentoni al
abrir su discurso— una institución que
preserva la identidad de los migrantes de
esta región en los países donde están
presentes».
«Pellegrino Artusi fue un hombre de
extraordinaria cultura —explicó— un lector
asiduo de muchas fuentes que ilustran la
gran tradición italiana. La pasión por la
comida lo llevó a publicar la primera
edición de su libro en 1891 y, desde
entonces, esta obra ha roto varios récords,
entre ellos el de ser uno de los tomos más
robados en las bibliotecas».